prólogo
El silencio de la habitación oscura y fría congelaba hasta la
médula, mi corazón parecía querer salirse de mi pecho, latía
fuerte y sonoramente, tan fuerte que podía oírlo a pesar de
mis sollozos, el castañeo de mis dientes, y mi respiración
agitada, quería huir de ese lugar, de verdad lo deseaba,
estar a salvo en mi habitación, cálida, con mi familia... pero
yo había elegido esto, quería salir de esa casa y esto fue lo
que logré por mis caprichos un presente
triste,horroroso,repugnante y doloroso.-
No hay comentarios:
Publicar un comentario